Así lo vio la web aurinegra
«EL LENOVO TENERIFE IMPONE SU SELLO Y DESARBOLA AL GRANCA»
¡A semifinales por la puerta grande! El Lenovo Tenerife impuso este viernes su sello para desarbolar al Gran Canaria (89-73) y meterse en las semifinales de la Copa del Rey por quinta vez en su vida. El grupo de Txus Vidorreta se llevó un derbi histórico, con un enorme ejercicio colectivo, cimentado en un meritorio trabajo atrás y en un partido muy valiente en ataque.
El conjunto aurinegro, liderado por un Jaime Fernández en estado de gracia, anuló por completo a varias de las figuras de su adversario y exhibió los automatismos que tan lejos le han llevado en los últimos años, esas señas de identidad que han permitido ganarse a pulso el derecho a soñar.
El partido nació con mucho ritmo, con los dos contendientes muy acertados de cara al aro. Bruno Fitipaldo y Jaime Fernández asumieron los galones de entrada para los aurinegros, lo que unido a los balones interiores a Gio Shermadini, permitió a los tinerfeños amagar con abrir brecha (17-13), si bien el Granca respondió con un par de triples iniciales de Vitor Benite y un John Shurna muy atinado.
Lo intentó el conjunto de Lakovic explotando las virtudes de Damien Inglis al poste bajo, pero su producción no fue a mayores; entre otras cosas porque el Canarias se mostró muy firme atrás. El buen hacer en tareas defensivas dio confianza a los laguneros para atacar con determinación e ir sumando argumentos a la causa.
El criterio para mover el balón y un acierto casi brutal (apenas ocho errores al descanso en el tiro, con unos porcentajes de 12/15 en lanzamientos de dos, 8/13 en triples y 7/7 en libres) dispararon a los de Txus Vidorreta, que mordían atrás y no perdonaban en ataque.
Con Jaime, Sasu y compañía viendo el aro como una piscina, los de la Isla Redonda sufrían sus peores minutos. En esa tesitura, el vendaval canarista se tradujo en un parcial de 16-1 para poner contra las cuerdas a su rival y ampliar su renta hasta los 17 puntos (55-38, min. 20).
El encuentro rebajó su ritmo a la vuelta de la pausa, pero aún así, en un escenario ligeramente distinto, el Lenovo Tenerife no bajó nunca el listón y acabó frustrando a un Granca preso de la impotencia. Lo intentaron los de Lakovic con un parcial de 4-12 en el epílogo del tercer cuarto, pero no fue más que un espejismo.
U 9-0 al inicio del último cuarto devolvió el partido a su sitio, ese que tan meticulosamente preparó el cuerpo técnico canarista para desactivar a su rival y disparar la euforia en una afición, la aurinegra, que se dejó la garganta en el Olímpic de Badalona para apoyar a los suyos en todo momento.
Una victoria más que merecida que permite a los tinerfeños alcanzar las semifinales de Copa por quinta vez en su historia y opositar con argumentos para continuar exprimiendo su buen baloncesto y seguir soñando con fundamento.
No hay comentarios