Hasta siempre, Carlos Cañadillas, ÁRBITRO de BALONCESTO

Falleció a la edad de 62 años y el sepelio tendrá lugar, hoy, a las 16:40 horas, en el Tanatorio Servisa (antiguo IKEA)

Formó parte, junto a su esposa María Ramallo Domínguez, auxiliar de mesa ella, del Colegio de Árbitros de Baloncesto en los años 80/90, presidido por Miguel Díez Alegre (qepd).

A lo largo de sus años en el mundo del arbitraje, fue ascendiendo de categoría y alcanzó la Segunda División Nacional, lo que actualmente es la Primera División Autonómica.

Un árbitro que sabía controlar las distintas situaciones que se viven en un partido, buen compañero y excelente amigo dentro y fuera de las canchas.

Como periodista especializado en este deporte presencié infinidad de encuentros por Carlos Cañadillas arbitrados, haciendo las crónicas y calificando sus actuaciones. Una de sus muchas virtudes fue la de aceptar los comentarios, ya fuesen favorables o le puntuara con un «cero». Jamás me dijo no estar de acuerdo con mi opinión.

Era de los que, después del partido, compartíamos comida y excelente rato allá donde Miguel Díez les designaras. Vivíamos esto de arbitrar y ser periodista con pasión, como pueden refrendar la legión de árbitros y auxiliares de mesa de aquellos ya lejanos años. Hablo de Pedro Sanz, Eusebio, Cárdenes, Lorenzo, Recuenco, Hernández Cruz, Chuchi, Ferrer, Dulce, Rafael, Arrocha, Pepe Naresh, Cigala, Cano, Armas y un largo etcétera.

El tiempo pasa y Carlos Cañadillas y María A. Ramallo optaron por dejar el Colegio de Árbitros. Ocupaciones profesionales obligaron a ello, aunque jamás perdieron el contacto con quienes fueron sus compañeros y amigos de hobbie.

La pareja emprendió un negocio de restauración que fue todo un éxito, el Restaurante La Costurera, sito en La Laguna, visitado, faltaría más, por su otra familia, la arbitral.

Carlos, convertido en un defensor a ultranzas de su querido Bajamar, pasó en las cercanía del mar sus últimos años, en todo momento rodeado de sus seres queridos.

Carlos, en su restaurante La Costurera, en La Laguna

Desde BASKETMANIATENERIFE.ES queremos mostrar el más sincero pesar a la auxiliar de mesa Ramallo Domínguez, su inseparable compañera, y a su hijo en tan complicados momentos.

Me quedo para siempre sus comentarios sobre el arbitraje de hoy comparado con el de ayer; con los ratos buenos que compartimos antes, durante y después de cada partido; por su amistad y educación. Y por lo bien que nos hacía de comer en La Costurera.

DESCANSA EN PAZ, QUERIDO CARLOS CAÑADILLAS, ÁRBITRO DE BALONCESTO