«El papel de la AFICIÓN, más decisivo que nunca»

Último encuentro de la liga regular en la ACB y partido importante para los objetivos del Lenovo Tenerife.

AGUSTÍN ARIAS.-

Mañana, a partir de las cinco y media de la tarde (hora canaria), Txus Vidorreta y los guerreros disponibles, recibirán a un Baxi Manresa que se estará jugando el estar o no en los play-off. ¡Ahí es nada!

Los de Pedro Martínez necesitan hacer lo mismo que haga el Baskonia en el WiZink Center ante el Real Madrid, con los madridista con la sensible bala de Gabriel Deck, gravemente lesionado el viernes en «La Fonteta».

Al ser una jornada de horario unificado, los rojillos se enterarán de lo que suceda en Madrid coincidiendo con el final del Canarias-Manresa, lo que les obliga a estar los 40 minutos centrados de su trabajo.

Es evidente que la última de las lesiones aurinegras, la sufrida por Gio Shermadini, ha terminado de reducir en un 50% la capacidad de rendimiento del equipo y de las rotaciones. Porque no hablamos solo de la ausencia del MVP, también han sido «palo tras palo» las de Jaime Fernández, Sasu Salin y Aaron Doornekamp.

Ya se comprobó en Lugo y Badalona el bajón del equipo, de ahí que mañana, en casa y con todo vendido, el papel que va a desempeñar la afición cobrará trascendencia.

La frase de «llevar al equipo en volandas» viene como anillo al dedo en esta última jornada. Será necesario entender la situación que están viviendo los profesionales aurinegros cuando tan sensibles ausencias obligan a un esfuerzo extra, pues se hace necesario suplir los puntos y rebotes que aportaba Shermadini; los triples que salían de las manos de Doornekamp; las penetraciones y dirección de Fernández y el sacrificio defensivo de Salin, casi siempre para frenar el quehacer del mejor exterior rival.

Lejos de las críticas, algo que «apasiona» a los «cuatro del taxi» que esperan siempre la llegada de las «vacas flacas» para rajar hasta del encargado del encendido de luces en el Santiago Martín, se hace necesario pulsar el botón de «reiniciar» y recorrer mentalmente lo que en esta misma campaña 23-24 nos han obsequiado los jugadores y técnicos del CB Canarias (Lenovo Tenerife).

Aquellos jugadores que nos mantuvieron de pie en la final de la BCL y los que dejaron fuera de la Copa del Rey a un Unicaja anfitrión, con las ausencias de los cuatro lesionados, nos piden ahora el apoyo desde las gradas del Santiago Martín. 

Ganar para sumar la ¡21 victoria!. Ganar para seguir soñando con la quinta posición. Ganar para que los «supervivientes» de la plantilla tengan un cierre de la fase regular lleno de alegría. Ganar para dedicarle ese éxito a Gio, Sasu, Jaime y Aaron, quienes querrían estar sobre el parquet pero que lo tendrán que seguir desde las sillas próximas al banquillo canarista.

Las peñas se encargarán de hacer uso de la batuta para que vuelvan a sonar los cánticos y para que, alrededor de las siete y cuarto de la tarde, el Santiago Martín e convierta en un coro para entonar el RIQUIRRACA.

¡Qué no se pudo ganar y el Canarias queda octavo! pues a preparar el partido con el Unicaja.

¡Qué pierde o gana pero es séptimo! pues a disputar un mínimo de dos partidos con el Real Madrid.

¡Qué al final ocupa la sexta posición! pues a tutear al Barça, que no siempre estará bendecido por los árbitros.

¡Qué logra hacer realidad el sueño y finaliza quinto! pues a enfrentarse al Valencia Basket o al Granca.

A sí de simple. A sí de natural. Esto es un deporte en el que uno gana y el otro pierde. Lo que pasa es que en ocasiones las siempre inoportunas lesiones merman el potencial del equipo que quería llegar vivito y coleando a los playoff.