«El inicio del último cuarto nos privó de hacer saltar la banca», titula la web de CB Andorra
El MoraBanc Andorra pierde en el fortín del segundo clasificado después de competir de tú a tú durante la gran parte del enfrentamiento. En una de las veces que lo hemos tenido más cerca es cuando se acabó teniendo más lejos, lo que acabó decantando el partido por los canarios.
WEB CB ANDORRA.-
Igualdad y tanteo entre ambos conjuntos para empezar un nuevo partido de los tricolores lejos de Andorra. Stan Okoye tomaba la responsabilidad ofensiva, pero los de Vidorreta rápidamente marcarían la línea con un parcial de 7-0 en un visto y no visto.
Pasados los minutos, Joan Plaza se veía obligado a pedir el primer tiempo muerto del enfrentamiento viendo cómo La Laguna Tenerife cogía confianza en ataque a velocidad de crucero (minuto 5, 18-9). O anotaban o lo hacían en segunda opción, malas noticias.
El paro surgía efecto y reaccionábamos devolviendo el parcial con un Sekou Doumbouya protagonista (minuto 8, 18-16). Un último y pequeño intercambio cerraría el primer asalto con el 24-20. De plato principal un duelo en la pintura para empezar un segundo cuarto que sería muy positivo para un MoraBanc Andorra muy luchador.
Felipe Dos Anjos por los nuestros, Gio Shermadini por ellos, ganaría la lucha el georgiano (minuto 12, 32-24). Desde la defensa volveríamos a encontrar el camino y aquí es donde siempre acabamos acercándonos a una buena versión.
Con este paso adelante detrás y la aparición de la pareja formada por Shannon Evans y Jerrick Harding daban la vuelta, por sorpresa de todos, al marcador del Santiago Martín (minuto 19, 45-50). Desgraciadamente, un balón colgado en Scrubb acabaría siendo la última canasta de la primera parte, la cual acabaría con el 47-50.
La salida de los vestuarios apagaba la chispa en forma de acierto, y los de Tenerife aprovecharían. Huertas cogía el timón y lideraba a los suyos para volver a abrir brecha, recuperando la máxima diferencia local (minuto 25, 63-54).
Los de Joan Plaza no estarían, ni mucho menos, muertos. Unos buenos minutos de Ben Lammers en ambos aros nos hacían seguir en la lucha y no dejar escapar a los canarios. Picando piedra y con un buen empujón en el aspecto ofensivo, liderado por Nikos Chougkaz, helaba al Santiago Martín y daba esperanza a un MoraBanc Andorra que veía premiada su resiliencia con el 70-69.
Cuando la flecha parecía ir favorablemente hacia arriba por los tricolores, la primera acción del último cuarto ha marcado, casi, un antes y un después en el devenir del partido.
Una acción de canasta y adicional de Shannon Evans II era revisada y anulada, y las jugadas posteriores a ésta eran tiros liberados que escupían el cerco mientras que al otro lado entraba todo.
Un parcial inicial de 11-2 cocinado en cinco minutos ponía muy cuesta arriba el partido. Del 70-69 al 85-71 y Joan Plaza obligado a pedir tiempo muerto.
El paro nos hacía mejorar, pero también teníamos delante a un rival que iba cerrando el partido a placer, y la cosa acabaría con el 96-84 final.
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