La crónica en la web AURINEGRA

La Laguna Tenerife sufrió este domingo su primera derrota de la temporada, al ceder ante el Baskonia de Euroliga (89-79), en un partido muy físico que los anfitriones llevaron a su terreno en la segunda mitad. Un mal tercer cuarto de los aurinegros condenó sus opciones tras haber opositado con argumentos al triunfo en el primer acto, especialmente en labores defensivas.

Con todo cuesta arriba (79-62, min. 36), los de Txus Vidorreta tiraron de orgullo para intentar la heroica en los últimos minutos, estrecharon el cerco hasta donde les llegaron las fuerzas (85-79), pero no bastó para darle la vuelta a un guión que ya pintaba a favor de los alaveses.

El choque nació con los visitantes tratando de ahogar la subida de balón de los aurinegros, con Rafa Villar sobre Marce; si bien los manejadores canaristas (salieron de entrada tanto Huertas como Fitipaldo) comenzaron a surtir con fluidez a sus jugadores interiores para amagar con abrir una pequeña brecha. Seis puntos consecutivos de Gio, dos de Fran Guerra y una penetración de Jaime Fernández, ponían el 5-12, en el electrónico.

No tardó en llegar la reacción de los anfitriones, que respondieron con un 7-0 (12-12), aprovechando la irrupción de Luwawu-Cabarrot y la energía de Rodion Kurucs. Los locales endurecieron su defensa y por momentos enfangaron el juego, pero el Canarias mantuvo la paciencia para igualar el listón físico y llevar la contienda a su territorio.

Los tinerfeños castigaban las pérdidas de los locales, al tiempo que Marce imprimía el ritmo y el criterio en ataque que más convenía a los suyos, incluyendo un par de triples de su cosecha (diez puntos al descanso para el brasileño). Eso, y el buen trabajo atrás, permitía a La Laguna Tenerife firmar un nuevo estirón en el marcador para irse a la pausa once arriba (29-40).

Tras el paso por vestuarios, y pese a una buena puerta atrás de Joan Sastre y un triple de Aaron al poco de la reanudación (32-45), el Canarias sufrió sus peores minutos ante un adversario que impuso su físico para imponer sus virtudes a campo abierto. Los tinerfeños se mostraron espesos en ataque y el parcial local creció hasta un 20-3 (52-48), que cambiaba del todo el panorama de la contienda.

Jugó entonces el Baskonia a favor de corriente, con su público volcado para buscar su tercera victoria consecutiva esta semana. El conjunto insular no dio con la tecla y salvo en la recta final no pudo contrarrestar el buen hacer de los anfitriones, que fueron sumando jugadores a su causa con el paso de los minutos.

Ya con todo cuesta arriba (79-62), La Laguna Tenerife intentó una reacción ya tardía, incluso dejándose varios tiros libres por el camino. Aún así, varias acciones de Fran Guerra en la pintura y un último arreón redujeron las distancias hasta el 85-79 metidos ya en el último minuto. Insuficiente para buscar lo que hubiera sido una remontada más que épica, por lo que la victoria acabó sonriendo al Baskonia.