«Se pudo consumar el milagro, pero…», por Bruno J- Álvatez
«Un Canarias totalmente desconocido en el tercer cuarto, que aprovechó el Granca para hacer un 0-12, metido de lleno en el encuentro, con la ayuda del trío arbitral que está vez fue totalmente desastroso, hizo que los puntos volaran para la isla redonda.
En el cuarto cuarto no se perdió la esperanza, se pudo hacer el milagro, pero las precipitaciones, la férrea defensa visitante y, sobre todo, la «pizca» de sangre en el brazo derecho de Marcelinho Huertas en los últimos segundos, que obligó a los árbitros a solicitar el cambio, tras «chivatazo» de uno de amarillo, impidieron acabar ganando o, al menos, forzando el tiempo extra.
Porque los dos tiros libres que iba a ejecutar el base brasileño para empatar a 71, los lanzó su sustituto, Bruno Fitipaldo, quien solo marca uno, el segundo, para establecer el 70-71.
Así y todo, el Canarias dispone de los últimos 20 segundos para ganar, pero se la jugó Fitipaldo desde el 6,75 y el balón no entró, para alegría de los cien aficionados amarillos situados en el tercer anillo.
Pero todo queda en casa, como me dice mi hermana Carmilla. Eso es verdad, los dos son equipos canarios y la victoria le podía sonreír a cualquiera de los dos.
Decir que todos los encuentros no son iguales, hoy en la primera parte solo vimos un triple de Aaron, se jugaba a la desesperada, y eran ellos los que formalizaban triplazos.
Hoy no se vio a VAN BECK, apareció en pista solo unos OCHO MINUTOS de los cuarenta.
Se jugaba de una forma muy despeñada, a veces sin sentido y otras veces perdiéndose balones.
A Shermadini se le vio muy poco en la pintura ofensiva, algunos pases del principio del tercer cuarto y en el último, cuando Huertas empezó a meterle balones al interior, pero en el resto solo convirtió personales.
Guerrita poco hizo, siempre se movía mal, como es su costumbre y Marcelinho empezó a encestar como lo sabe hacer, pero le metieron un marcaje riguroso que en toda la segunda parte no le llegaba el balón al aro.
Prefiero olvidar el partido de hoy, lo prefiero, puesto que el Granca vino con la lección aprendida y le emergieron muy bien las cosas.
El martes nos visita el Granada con el viejo conocido Lluis Costa. Ese partido lo tenemos que ganar, como sea, pues la clasificación para la Copa del Rey está a la vuelta de la esquina.
Que los que están entre algodones se recuperen en este corto espacio para poder así ganarle al Coviran Granada en el Santiago Martín.
Ánimos y Vamos Canarias».
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