«Un Everest en el camino», titula la web aurinegra

El Lenovo Tenerife afronta este domingo un reto de máxima exigencia coincidiendo con su visita al Real Madrid (Wizink Center, 17:30 hora insular, #Vamos). El grupo de Txus Vidorreta encara el desafío sin el MVP de la última Liga Endesa, el georgiano Gio Shermadini, lesionado el pasado sábado ante el Bilbao Basket; y con la consabida baja de Dejan Todorovic.

Estará ya con la expedición insular el recién llegado Julian Gamble, aunque apenas podrá hacer un par de entrenamientos antes del partido. El pívot estadounidense se ha sumado a la dinámica del grupo y formará parte de la doble salida de un equipo, el tinerfeño, que se quedará en la Península para viajar luego a tierras ucranianas, de cara a su estreno en la #BasketballCL 21/22, ante el Prometey.

El Real Madrid recibirá a los tinerfeños tras debutar anoche en la Euroliga con una victoria importante ante el Anadolu Efes (82-69) y con un casillero inmaculado en su estreno en la Liga Endesa (3-0).

Tras adjudicarse la Supercopa Endesa, celebrada en Tenerife, derrotando a los aurinegros en semifinales (70-72), el grupo de Pablo Laso prolongó sus buenas prestaciones en el arranque del torneo doméstico con tres triunfos en una semana ante San Pablo Burgos (70-63), Morabanc Andorra (58-86) y Monbus Obradoiro (78-68).

Sin nada que perder, los canaristas buscarán su mejor versión para hacer saltar los pronósticos. Conscientes de la dificultad del reto, jugarán sus bazas desde la solidez defensiva y el criterio para mover el balón, sabedores de que sus opciones pasarán igualmente por firmar un partido muy acertado en ataque y por equiparar el nivel físico de su rival.

Pasará esto último, no solo por salir airosos de la asfixiante defensa que plantearán los blancos a la subida del balón (Hanga o Taylor ya hicieron esa labor en la Supercopa); sino también por tratar de equilibrar la balanza en la batalla de la pintura. Por ahí, los tinerfeños se toparán con un equipo, con muchos centímetros y mucho músculo. De hecho, los madridistas son ya el conjunto que más intimida de la liga, con seis tapones y 5,6 mates por partido.

La calidad en la dirección de Heurtel, Williams-Goss o Carlos Alocén; las prestaciones en el perímetro de los Causeur, Abalde, Rudy Fernández y compañía; la versatilidad al cuatro de Yabusele o uno de los mejores juegos interiores de Europa, con Tavares y Poirier a la cabeza, serán algunos de los argumentos a contrarrestar.