
«A ALEXIS le leen su cartulina al entrar y a los «ultras» del Lérida le permiten TODO»
Suceden situaciones en la Liga ACB que hacen dudar sobre la aplicación de un mismo criterio para las 18 canchas.
Observa las gradas y comprueba cómo a unas aficiones y peñas se les permite «todo» y a otras «nada».
Cierto es que cuantas más medidas de seguridad de aplique mucho mejor para todos.
Lo que no se entiende es por qué a los «ultras» del Lérida se les «autoriza» a entrar en el Pabellón Espai Fruita Barris Nord pancartas de considerables dimensiones que llevan mensajes nada deportivos, así como cartulinas en las que se INSULTA al entrenador de La Laguna Tenerife, Txus Vidorreta y, por contra, en el Pabellón Santiago Martín se vigila estrechamente el texto de la cartulina que el aficionado ALEXIS despliega detrás del banquillo del CB Canarias.
Se entiende que se quiera evitar descalificaciones o mensajes ajenos a lo estrictamente deportivo, pero aquí el «marcaje defensivo» a la afición es «individual» mientras que en otras canchas peninsulares es una cómoda «defensa en zona».
Estoy convencido que en el «Santiago Martín» lo responsables de velar por la seguridad de las 5.000 personas actúan de la manera más estricta y correcta. La injusticia viene cuando en otros lugares de la España cestista que controla la ACB se permite lo que aquí no.
Lo que no merece aplausos y sí rechazo es que en la cancha del Lérida un energúmeno entre una cartulina en la que se lee (porque hasta salió en la tele) un claro insulto a Txus Vidorreta.
Podríamos hacer mención también a los megáfonos. Esos que se ven en todas los pabellones en manos de miembros de las distintas peñas de un mismo equipo y, sin embargo, aquí solo se permite uno (dicho por el responsable del protocolo del CB Canarias), optando las dos peñas aurinegras por renunciar al mismos. Salvo que un partido lo usen los Pollos Amarillos y al siguiente la Peña San Benito. Ironizando un poco, ni siquiera tienen compasión de la garganta de Clemente, el que entona el «Canariasssssssssss» a pelo.
Pero, claro, el lector igual se pregunta por qué perdemos el tiempo en denunciar estas irregularidades cuando a la hora de aplicar la Normativa los «controladores» de la ACB son igual de «pasotas», llegando, incluso, a «inventarse soluciones» para que un artículo clarito como el agua de Las Teresitas sea saltado a la torera.
Rovervito
Publicado el 13:05h, 26 mayoOtra cosa que no entiendo es ver a la Policía Nacional en pista, una vez terminado el partido y mientras escuchábamos a Marcelinho. ¿Había amenaza de «disturbios» aún cuando despedimos al equipo contrario con aplausos?.