«Mavra, un base de los de antes», titula EL PROGRESO de Lugo

El croata arribó a Lugo el pasado 29 de noviembre para ocupar la ficha que dejó huérfana Jordan Davis. Y lo hizo sin levantar apenas ruido en un breoganismo —de hecho, muy pocos sabían de su existencia— que en las jornadas siguientes hubo de digerir tres noticias de impacto: la destitución de Veljko Mrsic tras casi cuatro temporadas en el club, la llegada del técnico manchego y la grave lesión de Charlie Moore, el jugador enseña del equipo.

Mavra debutó el 8 de diciembre en Gran Canaria y desde entonces, de forma callada y gradual, ha ido ganando enteros en el equipo hasta convertirse en una pieza fundamental. Él mismo se definió como «un jugador de la vieja escuela», esto es, un base de los de antes. Cinco ex baloncestistas del Breogán, todos ellos bases, opinan sobre las cualidades que creen que debe tener un buen ‘uno’. Curiosamente, el ’19’ celeste aúna todas, o casi.

Tito Real. «Me gusta Mavra; lo hace todo a la chita callando y hace que su equipo juegue»

Tito Real incide en que en el baloncesto «hay muchos tipos de bases», pero tiene claro que Mavra es «el que me gusta». «Este lo hace todo a la chita callando porque no busca jamás el protagonismo. Defiende como un cabrón y hace que su equipo juegue, funcione, que es la labor fundamental de un ‘uno’; saber cuándo tiene que correr o parar el juego», indica.

«Se puede ganar o perder, pero el base siempre tiene que ser el entrenador en la pista y esto es complejo. A mí el croata me está encantando», añadió Real.

El lucense destacó también la labor de Luis Casimiro en el último encuentro ante el Bilbao, porque mantuvo en la pista a Mavra durante el último cuarto pese a que su rol a priori es el de base suplente, lo que fue crucial para llevarse el duelo. «Lo que hizo el técnico del Breogán, aparte de correcto, es respetable. A mí la llegada de Luis Casimiro me parece un acierto magnífico del club; no es el tercer entrenador que dirigió más partidos en la ACB porque sí. Psicológicamente ha conseguido recupera a Sakho», señaló.

Uno de los iconos del club del león de los años 80, que además ejerció como delegado del club casi una década, rehuye del triunfalismo pese a la buena marcha del Breogán: «Cuidado, que todavía queda mucho por jugar. Como me dijo Manel Sánchez hace 50 años: «Tito, en la meta apuntan y no preguntan».

Tito Díaz. «Mavra es inteligente, un base director experto, seguro y con buen físico»

Tito Díaz, que asimismo fue ex jugador y ex entrenador del Breogán, parte con ventaja a la hora de calificar a Mavra, en su actual vertiente de director deportivo del club celeste: «Es un jugador inteligente, un base director seguro porque comete pocos errores y pierde escasos balones, tiene buen físico, ve bien los pases, sabe jugar el pick&roll y sabe lo que el equipo necesita en cada momento».

El dirigente breoganista explicó que el baloncestista de Zadar encajó «perfectamente» en el grupo, al que se adaptó «bien y rápido». «Lo trajimos como un complemento a Charlie (Moore), pero cuando este se lesionó, también lo hace con Dae Dae Grant e incluso el entrenador los puede tener a ambos juntos en la pista», señaló.

Díaz cree fundamental para que Mavra se haya adaptado tan rápido tanto su actitud como que sea «experto» —tiene 30 años—, ya que viene de jugar en torno a 30 minutos y tener un papel absolutamente protagonista en sus anteriores equipos (Avtodoir Saratov, Split, Zadar, Krka Novo Mesto…).

«Aunque es más director que anotador, tiene una efectiva semi bomba y es muy completo, ya que puede defender a cualquier exterior y aporta en el rebote. Y aunque no es explosivo, tampoco es lento. No es un base típico de estos tiempos», indicó el directivo del Breogán. «También hay que destacar que es muy trabajador y buen compañero», finalizó.

Juanmi Alonso. «La función básica del base es ser la cabeza pensante del entrenador en la pista»

Juanmi Alonso cree que con la evolución del básquet «se ha perdido un poco el tipo de base director». «En la actualidad es cierto que cada vez existen más ‘unos’ que tanto física como técnicamente son muy buenos, cuyo rol principal es ser anotadores «, señaló. «Para mí, la principal función de un base es que sepa dirigir bien, que sea la cabeza pensante del entrenador en el campo», añadió el vasco.

El exbreoganista, cuya especialidad eran los robos de balón —fue líder en esta faceta en la campaña 1989-90, con 95, ya vistiendo la celeste— valoró también la llegada del nuevo técnico al banquillo del club de la ciudad de la muralla. «Con Luis Casimiro el equipo ha mejorado muchísimo, lo que está francamente bien y a mí me ha alegrado», incidió.

Para finalizar, Alonso recordó con cariño su paso por Lugo en dos periodos diferentes. «Fue una etapa maravillosa y guardo grandes  recuerdo y amigos ahí», dijo.

Dani López. «El base tiene que pensar en qué es lo mejor para el equipo en cada momento»

Dani López fue otro de los bases que vistieron la camiseta celeste que dejaron poso. El salmantino se retiró después de su último periplo en Lugo; el último encuentro que jugó fue el Leyma Coruña-Breogán de los cuartos de final por el play off de ascenso a la ACB, curiosamente con Quique Fraga en el banquillo de los lucenses y Tito Díaz en el de los herculinos.

López es diáfano al señalar que «el base tiene siempre que pensar en lo mejor para el equipo». «Es el encargado de controlar el ritmo de juego que le beneficia en cada momento del encuentro; esa es fundamentalmente su labor«, explica. «Por eso la visión de juego es su principal virtud. Si además aporta un plus; o sea, es un buen defensor o resulta un gran anotador, ya es extraordinario», adicionó el ex del Breogán.

Mavra ya ha encandilado al breoganismo de todos los tiempos con su juego tan mesurado como eficiente y el Breogán también ha crecido a la par que el croata.