«Confianzas… las mínimas», por Fernando Villamandos

SECCIÓN: DESDE LA PRIMERA FILA

TÍTULO: CONFIANZAS… LAS MÍNIMAS

AUTOR: FERNANDO VILLAMANDOS

«No se termina de rematar los partidos. No se “matan” los partidos. Esta claro que esta temporada no vamos a tener uno tranquilo, sin sobresaltos de última hora.

Pasó contra el Obradoiro, pasó con el Casedemon Zaragoza y no pasó en el partido de hoy de pura chiripa. Está bien lo de las rotaciones de los jugadores, pero es evidente que hay un momento determinado en donde se hace necesario sacar las diferencias claras para luego podernos permitir rotar lo que se quiera, asi al menos, como digo, para no tener sobresaltos.

Y ocurre lo que ocurre cuando se lucha con una igualdad manifiesta y no entra la pelotita y el equipo contrario se “lo cree”, se crece y vienen los apurones. Apurones que se proteste “el que no me han pitado” y allí me lo pitan todo. ¿Qué consecuencia trae esto? Pues que pitan una técnica a Txus (que facilidad tienen para hacerlo) sin pensárselo mucho (lo tienen fichado).

Y siguen los árbitros con el sentido de la igualdad de faltas personales. Sí, para ellos es muy importante tener un equilibrio de faltas (tantas a uno y tantas a el otro). ¿Que consiguen con eso?, pues ser mediocres. Se tiene que pitar lo que se ve y no estar perdonando porque luego el partido se te va de las manos.

Y sigo diciendo que los árbitros tienen que mejorar mucho para ponerse al nivel de lo que la ACB les esta exigiendo. Hoy se dio el caso que pitaron una falta que favorecía al Canarias y el público les aplaudió irónicamente, porque lo de hoy no tiene arreglo.

Todo esto lo que deja claro es lo de rematar los partidos, porque te puede ocurrir de todo en un partido y cuando quieres reaccionar no tienes posibilidades de hacerlo y lo pierdes de mala manera. Ejemplos esta misma temporada.

El equipo esta bien, fuerte y con ganas. Pero hay que jugar más fluidos, más abiertos y no embrollarse en ataques, que no van a ningún lado que es lo que hace que se precipite y se juegue un poco a que surja una individualidad para resolver.

Perdonen que sea tan pelma, pero es que cuando se terminan los partidos te quedas con cara de póker y con un “regusto” impresionante. Los aficionados no se merecen estas cosas.

DISFRUTEN DEL BALONCESTO