El Tenerife Clarinos, un «barco a la deriva» en lo deportivo y en lo económico

A escasas tres jornadas de concluir la primera vuelta en la Liga Femenina Endesa 22-23, el Tenerife Clarinos sigue siendo el «farolillo rojo», con el triste balance de una sola victoria y ¡11 derrotas!

Un dato que se agudiza cuando se observa que los otros equipos que navegan por la zona baja de la tabla están con cuatro y cinco victorias, situados entre la novena posición del Cadi la Seu y la penúltima que ocupa el IDK Euskotren.

La crisis no es solo de resultados ya que se comprueba cómo algunas jugadoras emblemáticas del equipo han optado por abandonar el club, otras exigen el pago de ciertas cantidades porque si no no juegan, incluso el nuevo entrenador no está en el partido con el Valencia Basket sin que desde la entidad lagunera se indice a los medios el motivo de la ausencia.

Estamos ante un «barco a la deriva», con un capitán, léase Claudio García del Castillo, que no parece encontrar solución a esta crisis. La carencia de recursos económicos es evidente, lo que hace peligrar el futuro de esta sociedad cestista.

Cabe preguntarse por el quehacer del «fichado» como gerente, persona vinculada al baloncesto que nada más asumir el cargo presentó la baja por enfermedad.

Y, por si fuera poco, la afición al baloncesto en esta Isla, que presumió de recuperar la plaza en la élite, le da la espalda al equipo, lo que se aprecia cada vez que juega el equipo morado en el Santiago Martín, con apenas 150 personas en las gradas. Triste, muy triste esta situación.

La próxima actuación del equipo morado será el día 22 de diciembre, jueves, cuando visite el Gran Canaria Arena para disputar el derbi canario de la LF-Endesa ante el SPAR Gran Canaria, décimo en la general, con el balance de 5-7.

Los dos últimos encuentros de esta primera vuelta los jugará frente al Perfumerías Salamanca (día 27), también fuera, para cerrar en casa ante otro grande, el líder actual SPAR Girona.