
Gonzalo, el gran perjudicado
«Este señor es un pedazo de entrenador, y un tipo excepcional. El baloncesto (tan alucinante y tan cruel) le debe 2 (bueno mucho más). Espero verle entrenar algún día dónde se merece, ya se lo ha ganado 2 veces».
Es el mensaje de JOTA CUSPINERA, entrenador nacional, a su compañero de profesión Gonzalo García de Vitoria (nacido en Bilbao el 3 de febrero de 1971) y con pasado en el CB Canarias como técnico-ayudante de su paisano y amigo Txus Vidorreta, quien no está atravesando por sus mejores días de felicidad.
Festejó por todo lo alto la gran temporada firmada con Betis Baloncesto en PRIMERA FEB, con ascenso ganado a pulso en la Final a Cuatro.
Pero la alegría se cortó de raíz esta misma semana, cuando la ACB confirmó la sentencia de un juez de Barcelona que no daba la razón al club sevillano, lo que impedía consumar el ascenso a la élite.
Una experiencia que Gonzalo ya sufrió hace una década cuando sucedió lo mismo con el Ourense Baloncesto al que ascendió deportivamente, pero no burocráticamente.
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