Padres expulsados de una cancha por mala conducta
Nos llega de la Isla Bonita una «crónica de incidentes». Porque como tal hay que calificar la conducta de unos padres de jugadoras del equipo tinerfeño La Victoria Namiju, de la Liga Cadete Autonómica Femenina.
El partido en cuestión enfrentaba en el Pabellón Municipal de Breña Alta al conjunto local Doguen Breña Alta Dominicas y al CB La Victoria tinerfeño, que concluyó con el triunfo palmero por 46 a 39, primer éxito para las niñas de Breña Alta tras tres jornadas de competición.
Hemos tratado de contactar con el club de La Victoria a través de redes sociales, pero ha sido imposible. Eso sí, la web BASKETMANIATENERIFE.ES está a disposición de su directiva por si estima necesario tratar este siempre delicado y nada gratificante tema en los que hay descalificaciones y amenazas. Porque el nombre del club siempre debe quedar muy por encima de actuaciones concretas aisladas.
Sí hemos podido contactar con una persona de total credibilidad y con enorme experiencia en el baloncesto palmero, tinerfeño y canario, quien nos indicó:
«Hola amigo! Lamentables comentarios de los padres de jugadoras del equipo tinerfeño CB La Victoria. Frases como «Los palmeros se quedaron trastornados con el volcán».
Y lo peor es que sus desprecios a los árbitros son por desconocimiento de las Reglas: una jugadora, con 5 faltas personales, se fue a la grada con los padres y el árbitro principal le indicó que no podía estar ahí y que debía volver al banquillo.
A partir de ese momento todo fueron comentarios y desprecios al colectivo arbitral, llegando incluso a decir «te espero en los aparcamientos». Incluso hubo tensión con los otros padres de las jugadoras del Breña Alta.
Fue una situación incómoda y realmente triste porque aquí no estamos acostumbrados a eso. Nos ha costado mucho en el baloncesto palmero, y los padres aquí saben que a un partido donde haya menores se va a animar y si se oye algo, primero se avisa al entrenador, ya que se supone que los conoce para que desistan de su actitud. Y si continúan se suspende el partido hasta que abandonen el terreno,si no lo hacen son los árbitros quienes se van de la cancha.
Una pena lo sucedido. Lamentable. A eso vienen a La Palma? ¿Por que acuden a una cancha a dar ese lamentable espectáculo? No lo entiendo. Me gusta mucho este deporte pero situaciones como está hacen que muchas veces prefiera quedarme en casa».
Lo dicho, mal ejemplo el que se ha dado a las jóvenes deportistas que estaban en la cancha para disfrutar de un partido de baloncesto de categoría autonómica. Ellas juegan, se divierten, unas ganan y otras pierden, pero al final prima el BA-LON-CES-TO.
Pero llegan unos padres, que son los llamados a proporcionar la educación y el respeto, y unos cuantos, que no se representan ni así mismos, montan tal numerito que afea el espectáculo y hace peligrar la conclusión del encuentro.
Los árbitros han reflejado en el informe los hechos y ahora solo queda que el Comité de Competición llame a capítulo al club para que sus dirigentes actúen en consecuencia. Las deportistas no tienen culpa del desprecio, la arrogancia y las amenazas hacia los árbitros con el «te espero en los aparcamientos» de cuatro o cinco personas.
No a los padres maleducados
Publicado el 09:36h, 25 octubreEste es el cuento de nunca acabar. Cuando pensábamos que los padres y madres menos controlalos educativamente hablando habían entendido el mensaje de EDUCAR DESDE EL RESPETO me encuentro con esta vergüenza. Las niñas, sus propias hijas, se merecen algo más que unos papás exaltados en las gradas. Saben lo malo de todo esto, que ahora desde el club les llaman la atención y optarán por quitar a su hija del equipo para defender la dignidad del padre herido en lo más profundo del MACHISMO. Es necesario denunciar estos malos comportamientos para que aprendan fe una puñeteras vez.
José Antonio González
Publicado el 09:37h, 25 octubreSolo utilizaré una palabra para definir estos comportamientos MALEDUCADOS
Alberto Rodríguez, abuelo de un jugador
Publicado el 09:43h, 25 octubreYo tuve la desgracia de ver cómo el.padre de un jugador se dirigió al banquillo del equipo en un tiempo muerto y le dijo a los chicos la manera de defender, despreciando al entrenador. El presidente se dirigió al personaje y lo mandó fuera de la cancha. Fue en el Paco Álvarez y eran infantiles. Aquel entrenador que era joven es hoy un respetado técnico del baloncesto. No dejemos sin denunciar este abuso a entrenadores y a árbitros. Gracias por permitirnos opinar.
Un vecino de La Victoria con pasado cestista
Publicado el 09:48h, 25 octubreMe ponen triste estas malas noticias. Tendría que ser el propio club el que convenza a estos padres que si se repite ese comportamiento no se les autorizará a ir a los partidos de sus hijas. Eso les debería contener. Lamentablemente el nombre del club sale a relucir cuando esa doctrina antideportiva no la practican en.el Club La Victoria
Respetar al tercer equipo
Publicado el 09:52h, 25 octubreSeguro que esas amenazas a los árbitros nunca se van cumplir, pero está francamente mal gritarle lo de esperarlos al salir. Porque yo soy el padre de uno de los árbitros y me llevan al cuartelillo de la Guardia Civil. No olvidemos que esto es un juego en el que hay tres equipos, una frase que aprendí de Agustín Arias en su página.
El padre Apeles
Publicado el 09:56h, 25 octubreSi eres padre o madre, eres algo «nervioso» y pierdes los nervios fácilmente, hazle un favor a tu hijo o hija y quédate en tu casa. Es un consejo de la Dirección General del Civismo
Aficionado estándar
Publicado el 12:33h, 25 octubrePuedo decir, porque los v,i que estos mismos padres se volvieron a comportar de esa forma el domingo por la mañana, puesto que jugaron un partido de Junior donde eran casi todas las mismas jugadoras cadetes y eran constantes los «comentarios» a los árbitros y a todo lo que les daba la gana de esos padres. Además que fue un partido donde lamentablemente para ellas perdieron claramente y los árbitros pasaron desapercibidos. Y el entrenador ni el club hacen nada nunca.
Manolo Barreto
Publicado el 20:50h, 26 octubreTodo mentira , ni el domingo de comportaron así ni en la Palma sucedió lo que dice este artículo . Antes de escribir una noticia deberían hablar con todos los implicados, puras mentiras.
Persona x
Publicado el 15:37h, 28 octubreBuenas, como persona que le encanta el baloncesto femenino, no es de ninguno de los dos equipos y presenció ese pertido puedo decir que la mayoría de cosas que dice ahí son mentira, los padres de las victoria le estban diciendo al árbitro que pitara las faltas, proque de verdad el arbitraje fue horrible, el árbitro se dirigió al entrenador de la victoria y le dijo “no se como sea en tenerife pero aquí los árbitro no aguantamos esa presión de los padres”, a lo que el entrenador le respondió que el no tenía la culpa, que en mi opinión lo que estaban diciendo los padres estaba bien, siguió el partido y llegaron las cinco faltas y dos técnicas a la número 16 de la victoria, el árbitro le dijo que o se iba a los vestuarios o se iba de la cancha a lo que los padres dijeron que como la iba a echar si era menor, en ese punto se desató una discusión, en la que se escucharon insultos de parte de los padres y amigos de las niñas de la palma hacia las niñas de la victoria, esos mismo chicos que cuando las niñas entraban al vestuario las escupian y las insultaban, ahira vamos a hablar de los padres, los echan de la cancha en el momento que se desató la discusión, el árbitro dijo que o se iban los padres o se iba el, que en mi opinión yo no me hubiera ido, para que no llegara a más las niñas de la victoria les dijeron a sus padre que se vayan y se fueron todo los padres de la victoria, cuando los de la oama también estaban como locos y no les dijeron nada, también see olvida comentar que el entrenador de la palma para hacer los cambios no le pedía persiso ni a la mesa ni a los árbitros a lo cual los árbitro no dijeron nada, yo solo pido justicia para las niñas de la victoria y que dejen de manchar su nombre como equipo, proque lo único que hacen es quitarle las ganas de jugar a las niñas, ojalá los árbitro aprendan a ser más justos.