Kostadinov, cansado de ser siempre el «DESCARTE», opta por marcharse

«El CB Canarias y Kostas Kostadinov han alcanzado un acuerdo para desvincularse, después de que el jugador haya solicitado su salida.

El club aurinegro agradece al interior búlgaro su aportación al proyecto canarista durante su etapa en la Isla y le desea suerte para sus próximos retos profesionales y personales».

AGUSTÍN ARIAS.-

Este es el comunicado oficial que cuelga en su página oficial el CB Canarias.

La noticia no sorprende. El jugador búlgaro, de apenas 22 años, apenas ha disputado ¡15 minutos! en lo que va de temporada en la Liga ACB y es razonable que, siendo el descarte una y otra vez, opte por buscar la manera de tener más minutos, aunque no sea con la camiseta aurinegra.

En el tiempo en pista en ACB ha aportado siete puntos, capturado un rebote y dado dos asistencias.

Por lo que concierne a la BCL, sus minutos se limitan a 19 minutos, repartidos en cuatro partidos, Algo ilógico cuando debería ser, precisamente, en esta competición donde disponga de mayor presencia. Sus cifras hablan de 12 puntos y dos rebotes.

Formó parte de la cantera del Real Madrid

Dicho esto, la responsabilidad de su «no continuidad» siempre ha estado en las manos de Txus Vidorreta, quien siempre lo ha visto como un «cinco», lo que se entiende que es el tercero en rotación, por detrás de Gio Shermadini y Fran Guerra

Respetando la opinión y decisión del técnico, entiendo que Kostas es más un «cuatro» que un pívot nato, primero por sus escasos 203 centímetros y segundo por su corpulencia, inferior a la de los «armarios empotrados» que se desenvuelven en la «pintura».

Pero el fichaje del también joven Héctor Alderete, un ala-pívot fichado para dar minutos de descanso a Doornekamp y Abromaitis, «condenaba» a Kostadinov a ver los partidos cerca del banquillo, pues ha resultado evidente que ni estando irregular Fran Guerra el coach depositaba su confianza en este chico de 22 añitos y con hambre de baloncesto.

Un hambre que le lleva a tomar la decisión de «buscarse la vida» en otra casa, como hiciera hace pocas semanas el base Lluis Costa al regresar a Covirán Granada para «sentirse otra vez un jugador» con minutos. 

Dicho esto, queda claro que Aniano Cabrera, desde su posición de presidente-ejecutivo, sabrá poner sobre la mesa algunas referencias para cubrir esa tercera plaza de interior, sobre todo cuando el «número dos» no vive sus mejores momentos. Seguir «abusando» de minutos con Shermadini es demasiado arriesgado, aunque el georgiano jamás renuncia a rendir a tope cuando salta al parquet.

De momento, supongo que recurrirá a Tim Abromaitis cuando sea conveniente ponerlo de «cinco», entendiendo que él es bueno en rebotes.