«La Laguna Tenerife despierta tras el descanso para arrasar al Leyma Coruña», titula EL DÍA de Tenerife

Después de 20 minutos para el olvido, el equipo canarista ofrece su mejor versión y anota 55 puntos

El cuadro de Txus Vidorreta se mantiene invicto este curso lejos del Santiago Martín

CRÓNICA DE CARLOS GARCÍA.-

Tras una primera parte más que deficiente -especialmente en ataque, con solo 32 puntos anotados-, un segundo tiempo para enmarcar (parcial de 27-55) le ha dado un solvente triunfo a La Laguna Tenerife en su visita al Leyma Coruña (62-87). Una victoria con la que el cuadro canrista se mantiene invicto a domicilio en lo que va de curso (tres éxitos en la ACB y otros tantos en la ACB), y además escala hasta la segunda plaza en la Liga Endesa con un balance de 5-1.

Sin tiro exterior en los dos cuartos iniciales (4/17) y muy inseguro con el balón (11 pérdidas), el Canarias le dio al duelo un giro de 180 grados para acabar gustándose frente a un rival impotente ante el vendaval aurinegro. Con Huertas mucho menos acogotado (19 puntos y cinco asistencias), un Fitipaldo casi infalible (21 puntos, cinco rebotes y otras tantas asistencias para 29 de nota), y una inusual actividad en el rebote ofensivo (14 en total), los de Txus Vidorreta saldan con pleno su doble salida a Galicia, a la vez que mantienen su línea firme para asegurar su presencia, lo antes posible, en la Copa del Rey de Gran Canaria.

Como si tuviera la necesidad de echar un pulso al equipo que más triples mete de la competición, de entrada La Laguna Tenerife se metió de lleno en un toma y daca desde el 6,75, aunque fue Fitipaldo, con sendas penetraciones, el que realmente produjo (2-4) para los isleños. Pese al 2-7, Vidorreta no terminaba de estar convencido y empezó a rotar piezas con Sastre y Shermadini. Y entre que el Canarias siguió empeñado en errar desde el perímetro (1/7), sus dos centers sumaron sendas faltas en el bloqueo, y regaló dos balones tontos (línea de pase y saque de fondo) que se tradujeron en cuatro puntos sencillos para su rival, las impresiones del técnico se confirmaron y el Leyma tomó la delantera (11-10).

Gracias a su fondo de armario el Canarias mantuvo cierta estabilidad (13-14), pero en absoluto buenas sensaciones. Incomodidad reflejada en ciertos números, como el 2/9 en triples, las cinco pérdidas cometidas y las escasas dos asistencias repartidas.

La tendencia no varió en el arranque del segundo acto, ya que el Canarias elevó a un 2/11 su particular pelea desde el arco (1/5 de Kramer), a la vez que se mantuvo en esas dos raquíticas asistencias tras 15 minutos. Sin poder pasar, Huertas optó por mirar el aro, pero tras una canasta suya (20-18) el base paulista encadenó varios errores, regalos que aprovechó el Coruña para dispararse hasta su máxima renta hasta el momento (25-18, 15′).

Con Marce cada vez más desquiciado por culpa de los más que agresivos 2×1 que recibía cada vez que se disponía a ejecutar un pase, el Canarias pareció tambalearse, con técnica a Vidorreta incluida (28-21). Nada cambió en los laguneros (4/17 en triples al descanso y 11 pérdidas, de las que los locales sacaron nueve puntos en los dos cuartos iniciales), que no tocaron fondo porque su rival tampoco se mostró muy fino, llegando a estar con 1/11 desde el 6,75 y 3/9 en libres.

En medio de esa alarma roja al menos no le tembló el pulso a Huertas, que con 10 puntos (28-26) sostuvo a un Canarias cada vez más espeso. De hecho, hubo que esperar 19 minutos para que entre Guerra y Shermadini realizaran su primer tiro de todo el choque. Con el Coruña multiplicando manos en líneas de pase y produciendo de manera colectiva (los 11 jugadores que saltaron a cancha habían anotado al intermedio pese a los 35 puntos convertidos), aún así los de Vidorreta rescataron una versión más reconocible, en lo que a compartir el balón se refiere, para empatar (30-30).

Sin embargo, un flojo 1×1 (triple de Jakovics) y la displicencia para no hacer falta cuando tenía una que gastar (mate de Diagne), La Laguna Tenerife se fue tres abajo al intermedio, pero de nuevo abrazado a las peores sensaciones posibles (35-32).

Quizá escarmentado por su imagen hasta el ecuador, el CB Canarias fue un equipo totalmente diferente a la vuelta de vestuarios… pese a los dos triples errados de entrada por Kramer. Pero ahí el cuadro lagunero encontró un filón en el rebote ofensivo para ser letal en las segundas opciones (35-40). Primer intento de tomar el control que el conjunto de Txus Vidorreta vio abortado toda vez que su rival seguía sin permitirle la continuación del pívot en el 2×2, y porque se vio obligado a varios tiros lejanos y al borde de la posesión (41-43).

Pero tras amagar con ese estirón, el Canarias redobló su presencia en el rebote ofensivo -cerrando por completo el suyo propio- y a la vez empezó a mover el balón con mayor fluidez para dar con opciones fáciles bajo el aro. Con nueve asistencias en un solo periodo -había repartido seis en toda la primera mitad-, la última de Sastre para que Abromaitis firmara el 43-53 con 10 minutos por delante.

Último periodo en el que los aurinegros estiraron su inercia positiva, produciendo en segundas opciones, dentro con Shermadini, y, por fin, desde el perímetro: triple de Doornekamp para el 48-63. Ese nuevo arreón permitió a los laguneros terminar de creérselo y dejó tocado a un Leyma Coruña, que lo más que pudo fue meter el duelo, durante unos minutos, en un intercambio de canastas (58-70). Pero solo eso, porque el Canarias hizo que en el epílogo su acierto fuera casi superlativo, sobre todo en el libre (9/9) y desde el arco (5/9). A velocidad de crucero los de Vidorreta firmaron un 19-34 para acabar ganando por un abultado 62-87