Llull ENMUDECIÓ el «Santiago Martín»

BALONCESTO, dícese de un deporte que enamora precisamente por su grandeza, la de tener opciones de victoria cuando se lucha hasta el instante final.

AGUSTÍN ARIAS.-

FOTOS: EMILIO COBOS.-

Y esa grandeza se palpó este mediodía sobre el parquet de un «Santiago Martín» que vivió una jornada apoteósica, entre dos grandes de la Liga ACB 25-26, cuyo veredicto se conoció en el último instante, coincidiendo con el bocinazo que clausuraba el juego.

Y si en Murcia, en el curso pasado, fue un triplazo de David Kramer quien sentenciaba en el último segundo, en esta ocasión el final fue muy similar, si bien el protagonista fue el Real Madrid y, en concreto, su capitán y «matador» Sergio Llull, un especialista en jugarse el último balón.

Fueron 40 vibrantes minutos, con un segundo cuarto de claro color blanco, que parecía el inicio de una cómoda victoria visitante. Aquel 9-15, que se unía al +2 (16-18) del primer acto, establecía al descanso una renta de 8 tantos para el Real Madrid (25-33).

Lejos de venirse abajo, a pesar del 0-5 que colocaba la máxima renta lograda por los de Scariolo en esta cita (25-38), La Laguna Tenerife se mete en el partido de manera paulatina, primero con un triple de Van Beck (era su punto número 11), luego con tres tiros libres de Fitipaldo, para aportar más emoción al choque con un nuevo acierto desde el 6,75 de Van Beck, distancia desde la que, en el siguiente ataque aurinegro, Rokas Giedraitis anotaba, uniéndose a la fiesta de la efectividad ofensiva Héctor Alderete para establecer un ilusionante 44-46 a 110 segundos de finalizar el tercer cuarto.

Claro que la grada estalló de alegría, de ahí el cántico de «Sí se puede, sí se puede» que servía para incrementar la moral de los discípulos de Txus Vidorreta, al tiempo que se le metía una buena dosis de presión a los «merengues».

Un triple de Okeke ponía el 44-49 que encontró respuesta, primero con el matazo espectacular de Fran Guerra, en presencia de los «gigantes blancos», y dos tiros libres del base uruguayo para el definitivo 48-49, siendo el parcial de estos diez minutos de 23 a 16.

Se soñaba en la previa con poder llegar vivos al último cuarto y se había logrado. Quedaban diez minutos para conocer el veredicto final y La Laguna Tenerife, a pesar de no contar con la magia de Huertas ni el trabajo defensivo de Sastre, lleva la emoción hasta el últimos instante, con claras opciones de cobrar ventajas en el electrónico hasta en cuatro ocasiones, pero o bien habían resbalones o los blancos cerraban bien su canasta.

Los «culpables» de esa entrega y ese coraje 

Tenían nombres y apellidos, los de ocho de los once jugadores hoy utilizados por Vidorreta, quien no contó en esta ocasión con Kostas Kostadinov.

Un Bruno Fitipaldo dirigiendo con acierto, aunque hoy no vio canasta salvo desde el tiro libre.

Un Jaime Fernández que dejó en evidencia a quienes se empeñaron en vaticinar una baja de tres semanas cuando el chico demostró estar «curado».

Un Van Beck que comienza a ganarse la credibilidad de la afición y la confianza del entrenador.

Un Alderete que dejó clara constancia que es un tremendo defensor y que en ataque juega con descaro.

Un Fran Guerra que lo hizo bien, robándole protagonismo a un Shermadini que extrañó muchísimo a Marcelinho.

Un Aaron Doornekamp duro atrás y efectivo en los momentos que más «quema» el balón.

Un Thomas Scrubb firme en su quehacer defensivo y acertado desde el exterior.

Y un sorprendente Dylan Bordón que le echó coraje a sus primeros 10 minutos con el Canarias en la ACB, aportando una canasta y recuperando tres balones…

Sí, no cito a Tim Abromaitis porque hoy apenas gozó de 10 minutos, valorando en negativo (-1) y con «ceros» en todas sus casillas. Acertada decisión la de Txus de concederle sus minutos al joven Alderete y sentar al norteamericano quien, tristemente, vive sus peores momentos como aurinegro.

Y llegó el apasionante último cuarto

El primer ataque local es para cobrar ventaja, pero un inoportuno resbalón de Scrubb descarta esta opción.

En las siguientes jugadas, triples para Llull y para Scrubb (51-52).

Llega la segunda oportunidad, pero Bruno no acierta desde el 6,75. Se recupera atrás, merced a la extraordinaria defensa, de nuevo con balón para ponerse por delante, pero de nuevo se resbalan Van Beck y el receptor del pase, Fitipaldo.

El Madrid no falla y una jugada de 2-1 de Campazzo y un triple de Hezonja hacen que las diferencias sean ahora de 7 tantos (53-60) a 5:39 del final.

Jaime penetra, anota y saca adicional, que no convierte, si bien el rebote lo captura Doornekamp, quien asiste para que Fernández se clave un triple que vuelve a dejar en apenas dos tantos de margen (58-60). Quedan 5 minutos exactos.

Sigue sin anotar los madridistas y, de nuevo, otra ocasión para empatar o ponerse uno arriba. Se juego para buscar el mejor tiro y el balón le llega a Aaron, quien totalmente liberado falla.

Anotan ellos y, en el ataque local, sí acierta el triple Doornekamp para cel 61-62, con 3:25 por delante.

Hay triple de Deck (61-65). A 2:16 Guerra desperdicia dos tiros libres. Hay recuperación que depara una canasta de Scrubb (63-66) a 1:51 del final,

Las espadas estaban en todo lo alto del Santiago Martín. La Laguna Tenerife contaba con el respaldo de 5.000 aficionados, considerando que al menos cien eran seguidores del Real Madrid.

El peligro visitante estaba en el exterior, ya que si bien el dominio blanco en el rebote fue demoledor (22 por 44) la ausencia por cuatro faltas de Tavares era un alivio para Guerra/Shermadini.

Pues dicho y hecho. Triple de Hezonja (63-69) a 1:27.

Mate espectacular de Fran Guerra (65-69), gran defensa para recuperar y la gran jugada del partido por lo que se estaban jugando aurinegros y blancos: Triple de Doornekamp con tiro adicional que convierte La jugada de cuatro puntos colocaba en el marcador el empate a 50 cuando apenas restaban 50 segundos.

A 35 segundos hay «lucha», con saque que favorece al Canarias. Se juega para cobrar ventajas, pero la defensa madridista impide que ese ataque tuviese premio.

Ataca el Real Madrid para recuperar el mando, pero hay falta ofensiva que da dos tiros libres a Jaime Fernández cuando tan solo restaban dos segundos.

La consigna, como así desveló Vidorreta y el propio Jaime en sala de prensa estaba clara: Meter el primer tiro libre y tirar a fallar el segundo, lo que hacía casi imposible que el rival anotara.

Pero Jaime erró su primer lanzamiento, lo que le obligaba a meter el segundo para ponerse uno arriba, como así ocurrió (70-69).

El «minuto» de Scariolo era de libro. Se estudió la jugada, con el balón para un claro destinatario, Sergio Llull.

Su defensor, el joven Alderete, no pudo frenar los dos pasos dados por el capitán blanco y su posterior tiro al cristal que acabó entrando. Era el 70-71. Era la victoria para el Real Madrid. Era… un palo de agua helada para un Santiago Martín que quedó enmudecido.

Se revisó la acción para comprobar que el tiro estaba dentro de tiempo y así fue.

El Real Madrid, como aconteciera en la Supercopa, salía victorioso por una diferencia mínima.

Dicho esto, reconocer que…

Primero: Este equipo también sabe pelear y luchar por el triunfo a pesar de la sensible ausencia de su figura Marce Huertas.

Segundo: El rebote no se debe «regalar» aunque esté Tavares en la «pintura». El 22-44 fue de escándalo.

Tercero: Los tiros libres son importantísimos y hoy se fallaron seis.

Cuarto: Alderete tiene calidad para disfrutar de los minutos que parece «no querer» Tim Abromaitis (apenas valora +26 en 9 jornadas).

Quinto: Van Beck, tras su buena actuación en la «ventana» parece recuperar sus buenas sensaciones.

Sexto: Dylan Bordón es un argentino con descaro al que no le tembló el pulso el verse ante el Real Madrid

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Los árbitros del encuentro fueron Perea, Serrano y Sánchez Benito, con el principal sustituyendo al lesionado Emilio Pérez Pizarro.

Le permitieron toda clase de protestas airadas a Tavares y a Campazzo. Los aspavientos en cualquier otro jugador/es son sancionados con técnica, pero estos dos parecen estar «protegidos».

En las incidencias, placa del club a David Kramer, entregada por Nico Richotti, por la temporada 24-25 en el CB Canarias.

La afición respondió muy bien a la llamada solidaria del Club para la tradicional Recogida de Alimentos.

Con esta grada supletoria, en la zona del palco del Santiago Martín, el aforo del mismo pasó de 5.100 a 5.116. Lo que no se sabe es si fue por contentar a tantos invitados por tratarse del Real Madrid o si permanecerá toda la temporada. 

 

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Las palabras de Txus Vidorreta tras caer ante el Real Madrid

«Ha sido un partido que ha tenido de todo. Hemos empezado bien, con un buen equilibrio en ataque y en defensa, lógicamente sabiendo que su quinteto titular tiene muchas opciones de penalizarte. Hemos mantenido un buen tono durante el primer cuarto, especialmente defensivamente. En el segundo hemos fallado algunos tiros abiertos y ellos han anotado tres consecutivos y han abierto una diferencia que a base de esfuerzo y con muy poco acierto hemos podido no irnos con el partido perdido al descanso. 25 puntos son muy pocos y para estar vivo hay que hacer tantas otras cosas bien que las hemos hecho y nos hemos mantenido ahí.

En el inicio del tercer cuarto parecía que lo rompían pero nos hemos recuperado, hemos empezado a meter algunos tiros y cuando teníamos alguna posesión para ponernos por delante o la perdíamos o fallábamos y ellos nos penalizaban con algunos triples. Hemos seguido teniendo fe y hemos encontrado jugadores que diesen respuesta al tono físico que tiene el Real Madrid, muy superior a nosotros. Y bueno, con mucha fe nos hemos puesto por delante al final pero el orden de los factores altera el producto. Hemos fallado el primero y metido el segundo, no sé qué hubiese pasado si el orden hubiese sido al revés que era lo que queríamos. Pero sí está claro lo que ha pasado con este orden pudiendo pedir tiempo muerto y después con Llull anotando sobre la bocina con una de esas canastas que lleva anotando toda la vida. Hemos hecho un gran esfuerzo, hemos crecido mucho como equipo, estoy orgulloso de mis jugadores pero nos ha faltado ese toque extra para ganar el partido.

Jaime no ha tirado bien ese primer tiro libre y evidentemente el segundo había que meterlo. A partir de ahí el balón ha llegado a Llull, ha jugado muy cómodo y ha anotado una canasta de mucho valor. No es fácil, pero él está tan acostumbrado que sabemos que siempre puede hacerlo. No hay que darle más vueltas. El equipo ha estado muy generoso en el esfuerzo todo el partido. Hemos ido recuperando acierto según avanzaba la segunda parte y con el arranque final parecía que nos la llevábamos pero nos hemos quedado a un punto otra vez.

Llull es que es muy bueno, no voy a enseñarlo yo aunque sí fui de los primeros cuando fui Campeón de Europa con él en Zaragoza en 2004. Es muy bueno, lo ha hecho super bien y ha medido los tiempos y lo ha hecho todo con una paciencia y la calidad y experiencia que lleva demostrando pues eso, 21 años.

Las cosas van evolucionando. El viernes pensábamos que Jaime no iba a hacer esfuerzo colectivo y el sábado como no tuvo molestias pues contamos con él por lo que ante la baja de Joan Sastre porque no se había recuperado del proceso que ha vivido estos días. Y de Marce porque no puede prácticamente… vamos a hacer una prueba el martes porque los 15 días se cumplen el viernes pues lo tiene difícil. Porque el proceso que está llevando para recuperar la fascia hace que tenga mucho dolor. Como ya sabéis como él lo intentó jueves y viernes pero ya el sábado no entrenó. Lo va a intentar el martes pero no sabemos qué va a suceder. Hemos crecido como equipo porque Beck ha hecho uno de sus mejores partidos, Jaime ha estado muy bien, otros jugadores han ayudado a que el equipo se metiese y parecía el día para culminarlo con una victoria épica y nos hemos quedado a un puntito».

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