Los aurinegros SABEN que la clave estará en la DEFENSA
La expedición del Lenovo Tenerife partió esta mañana hacia tierras valencianas
AGUSTÍN ARIAS.-
Lo hizo con la consabida baja del balear Joan Sastre, a quien le quedan algunas semanas más de inactividad, y con la incorporación del argentino Leandro Bolmaro, la «perla argentina» que Aniano Cabrera y Txus Vidorreta han incorporado al proyecto canarista 22-23.
Tras los entrenamientos en el Santiago Martín, jugadores y cuadro técnico subieron a la guagua que desde el pabellón les trasladó a Los Rodeos, para emprender el viaje a tierras peninsulares.
No tenemos nada claro que Txus Vidorreta afronte al llegar a Valencia la ligera sesión de tiro en «La Fonteta», toda vez que esta noche disputan su encuentro oficial de la LF-Endesa Valencia Basket y Tenerife Clarinos. Pero no será por falta de instalaciones, ya que L’ arquería está a dos pasos y el hotel de concentración, si no han cambiado, en la misma calle.
Después de tres semanas de ensueño para el vestuario lagunero, con la conquista del título de campeón de la Intercontinental; el subcampeonato de la Copa del Rey y la clasificación para el Mundial’23 de las selecciones con presencia canarista (Shermadini, Salin y Huertas), el Lenoto Tenerife vuelve a la competición doméstica.
Y lo hace con una complicada visita al Valencia Basket, conjunto que ayer sufrió un serio correctivo en Euroliga al encajar un escandaloso 114-75 ante el Baskonia, en el «Buesa Arena».
Cierto es que los de naranja tienen importantes bajas y que, tras una aceptable primera mitad, en los segundos veinte minutos «no estuvieron», siendo barridos literalmente por los de Joan Peñarroya, ex técnico del Valencia Basket.
En palabras de Mumbrú: “No hemos jugado buena defensa ni en la primera parte ni en la segunda, anotaban en todas las ocasiones, lo peor es que en los últimos minutos debíamos seguir peleando y no lo hemos hecho, y esto me hace estar enfadado con el equipo. Tenemos que pedir disculpas a nuestra afición por la imagen que hemos dado, podemos perder pero no es la forma de perder del Valencia Basket. El último cuarto ha sido duro, sin lucha, y esto no lo podemos permitir”.
En el seno aurinegro no se piensa, ni por asomo, en encontrarse mañana domingo a un rival desmotivado. Todo lo contrario, la lectura es clara: tras el varapalo saldrán decididos a reconciliarse con la grada y evidenciar que el nivel de juego está muy por encima de los tristes 20 minutos de ayer en Vitoria.
Alex Mumbrú seguirá teniendo las bajas de los lesionados Kyle Alexander, Sam Van Rossom y Millán Jiménez, pero por el contrario se espera el regreso a la competición del base Martin Hermannsson.
Como dato, en la primera vuelta la victoria sonrió a Lenovo Tenerife por 94 a 78, con esta ficha:
94 – Lenovo Tenerife (27+23+23+21): Fitipaldo (-), Fernández (22), Cook (5), Doornekamp (5), Shermadini (19) –inicial-, Guerra (12), Huertas (10), Sastre (-), Diagne (-), Abromaitis (9) y Salin (12).
78 – Valencia Basket (17+19+18+24): Jones (9), Prepelic (-), Puerto (13), Web III (11), Dubljevic (2) –inicial-, Harper (-), Claver (6), Pradilla (8), López Arostegui (11), Van Rosson (11), Radebaugh (-) y Alexander (7).
Árbitros: Pérez Pizarro, Perea y Baena. Señalaron técnica al entrenador del Lenovo Tenerife, Txus Vidorreta (min. 34).
Incidencias: Pabellón de Deportes Santiago Martín, ante más de cinco mil personas.
En aquella cita del 19 de noviembre de 2022 la defensa fue la clave del éxito canarista. Por eso Vidorreta insiste en que será también decisivo ese buen trabajo para salir airoso de una cancha TOP de la acb. También habrá que amarrar muy bien el rebote defensivo y buscar robarlos en el aro valenciano, aspecto en el que jugarán un papel clave Shermadini/Guerra, así como Abromaitis/Doornekamp/Cook.
Valencia Basket ocupa la octava posición, con el balance 10/10, con el Lenovo Tenerife conservando a privilegiada cuarta, con 14/5, solo superado por los tres de Euroliga.
El pronóstico está con un 60% para los locales y un 40% para los insulares. Ojalá que los señores Carlos Peruga, Carlos Cortés y Rubén Sánchez Mohedas pasen desapercibidos y que sean los jugadores y sus técnicos los únicos que dictaminen al ganador.
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