La afición aurinegra recibió al equipo en el Gran Canaria Arena

A una hora para que se ponga en marcha el DERBI CANARIO de la ACB, es tiempo para revivir lo acontecido en la mañana de hoy.

Tras el madrugón para llegar a tiempo de subir al barco y las casi dos horas de travesía, una amplia representación de los aficionados canaristas desplazados a Las Palmas se dieron cita en los exteriores del Gran Canaria Arena, a la espera de la llegada de la guagua que trasladaba a la expedición canarista desde el hotel de concentración.

Allí incluso con bengalas amarillas, ovación y cánticos para jugadores y técnicos. Por medidas de seguridad la guagua siguió hasta el acceso al recinto.

De inmediato, del vestuario al parquet para comenzar la sesión de calentamiento, que a menos de 60 minutos para el inicio del partido continúa, bajo la atenta mirada de Xisco Sanz, preparador físico.

Los TRESCIENTOS ya ocupan sus lugares en el graderío y solo falta que comience el partido, porque el espectáculo había comenzado desde muy tempranito en Tenerife.

Seguro que va a reinar la deportividad, con dos aficiones que quieren que gane su equipo, pero que se respetan mutuamente, ello a pesar de que a los «cuatro del taxi canarión» insistan en «culpar» a Txus Vidorreta de calentar el derbi por decir que buscarán sorprender y ganar el derbi. 

Y sobre lo que el director deportivo se ha montado, con la complicidad de un periodista, puntualizar una cosa. Si dicen que ambos clubes tienen alrededor de 10 millones de euros y que el Granca se gasta «solo» cuatro en la plantilla ¿dónde van los seis millones restantes? Porque a Mike Tobey se lo «quitaron» al CB Canarias por ofrecerles una suma importante, superior a la que le ofrecía el CBC.