El Obradoiro se ve superado por los triples del Lenovo Tenerife y mira cara a cara al descenso

Dura derrota del Monbus Obradoiro ante un Tenerife que brilló desde la línea exterior y que deja a los compostelanos a la espera de los resultados de este domingo para comprobar si cae a los puestos de descenso. Quiero y no puedo de los de Moncho Fernández, que no pudieron mantener el ritmo anotador de los de Txus Vidorreta, que se imponían por 86 a 97.

El conjunto compostelano se presentaba al encuentro con ganas de demostrar que tienen la capacidad para salir de la mala racha de resultados ante un habitual de los playoffs de la Liga Endesa como es el equipo tinerfeño. Pese a ello, los de Moncho tenían claro desde antes del encuentro que no sería fácil, ya que si algo ha demostrado el equipo entrenado por Txus Vidorreta año tras año es que están cargados de talento y que sus componentes se entienden a la perfección.

Los jugadores saltaban a la pista y Guerrero comenzaba con un gran mate tras capturar un rebote ofensivo precedido de un tiro exterior de Howard. El Obra comenzaba animado en ataque, encontrando buenas opciones y espacios que les permitían anotar con comodidad e iniciar con el 11-4 arriba con un gran Guerrero en los dos lados de la pista.

Pese a todo, ambos equipos debían mejorar sus defensas, donde siempre se encontraban espacios. Solo los errores en el tiro de los propios jugadores impedían que el marcador se fuese a cifras elevadas. Entraba la pareja de ucranianos del Obra a pista y Kovliar arrancaba con ganas de anotar, consiguiendo un gran triple y con Howard anotando una gran bandeja. Tras ello, Blazevic entraba a pista para jugar con dos grandes, manteniendo la apuesta de Moncho por ponerlo al 4.

La mala selección del escolta puertorriqueño, los errores defensivos del Obra y algunas pérdidas propiciaban que los compostelanos no se pudiesen marchar con mayor ventaja al finalizar el cuarto, donde Kovliar demostró estar muy cómodo con su ventaja física sobre los bases tinerfeños. Los 10 minutos iniciales acababan con el 24-21 en el marcador.

Comenzaba el segundo cuarto y el Obra comenzaba con dificultades en la defensa del perímetro, donde encontraban siempre a un tirador liberado los de Vidorreta, solo respondidos por un sorprendente triple de Pustovyi.

Parecía contrarrestar el Obra con un Blazevic que en el 4 superaba siempre desde el poste a Doornekamp, compensando la pérdida de movilidad en la defensa exterior y apostando siempre por el interior en ataque con Zurbriggen, Muñoz, Rigoberto y Pustovyi en pista.

Pese a todo, el balance salía en positivo para el Tenerife (31-34), que además le sacaba una polémica falta en ataque al lituano.

El Alquimista pedía tiempo tras una falta de Doornekamp sobre Blazevic, que volvía a pista con Abromaitis como pareja de baile y con Rigoberto anotando. El partido se mantenía en las mismas, un duelo entre los triples liberados de los de Vidorreta (4/7) y el daño que producía el lituano en el poste. Pero finalmente salía de pista tras su tercera falta y regresaban Tinkle y Howard. De nuevo tiempo de Moncho tras una canasta fácil de Huertas (34-41).

El capitán Álvaro Muñoz conseguía un gran dos más uno, pero el Tenerife se mantenía más fuerte y pese a dos meritorios robos del Obra, Tinkle erraba una canasta fácil en el segundo y a la contra encestaba de tres Guy. Le costaba subir el balón a los de Vidorreta pese a estar separándose del marcador y el técnico pedía tiempo para solucionar el problema en las ayudas de los compostelanos sobre Huertas. Al regreso Guerrero (10 puntos) mantenía su buen nivel y era el pegamento que evitaba la escapada del Tenerife tras una exhibición exterior con 7 de 10 en triples. 43-54 al descanso.

Arrancaba la segunda parte y Moncho volvía a apostar en esta ocasión por la pareja de ucranianos con Scrubb, Tinkle y Howard. Fitipaldo, que en la primera parte cosechó 10 puntos, respondía un dos más uno de Pustovyi con un triple en un arranque calmado en la anotación. El Obra se precipitaba en ataque con Kovliar y Tinkle, por lo que Moncho daba entrada de nuevo a Zurbriggen por el joven base.

Pedía tiempo Moncho, que discutía con Vidorreta y se anulaba el parón. El partido comenzaba a calentarse, al igual que la necesidad del Obra. Los isleños cometían la quinta falta y los locales debían aprovecharlo para remontar siendo más agresivos en ataque. Y así lo hicieron los de Sar, reduciendo la desventaja por debajo de los dos dígitos y prendiendo la Caldeira con el dos más uno de Scrubb (58-64) que propiciaba el tiempo de Vidorreta.

No erraba el canadiense y cuando la fortuna parecía sonreír al Obra en un error de Cook al tratar de realizar un mate, se tornaba en mala al convertirse la jugada en triple de Guy y tiempo de Moncho (59-68). Volvía a apostar por dos grandes Moncho con Guerrero y Blazevic, pero el Tenerife volvía a apoderarse del ritmo de un choque en el que al Obra parecía faltarle dirección en su juego. Entraba Vicedo por primera vez en pista, que se llevaba los aplausos de Sar y la ventaja por 64-73 al final del cuarto.

Solo le quedaban 10 minutos al Obra para la remontada y ambos equipos entraban con un ritmo frenético, manteniendo la apuesta por los dos grandes por parte de Moncho. El Obra seguía sufriendo con los tiros exteriores de los isleños, que siempre encontraban a un hombre liberado doblando el pase. Tiempo de Moncho en el minuto 7 para reencontrar a los suyos (70-83).

Volvían a buscar a Blazevic los compostelanos, pero no estaban cómodos ni en ataque ni en defensa. De nuevo, un partido contra el crono para el Obra, donde las precipitaciones locales y la calma de los isleños no auguraban nada bueno.

En el ecuador del choque los de Vidorreta llegaban a la cuarta falta y el Obra debía de remontar 14 puntos. Era el momento de ser agresivos y Scrubb aparecía como luz tras el túnel sumando puntos en los instantes clave. Entraba Howard como base por Kovliar para ayudar a sacar faltas y generar una amenaza mayor. Pero Fitipaldo dilapidaba cualquier amago de remontada con sus triples y el Obra caía por 86 a 97.