Caer con ORGULLO en una final disputada

No pudo ser. El Lenovo Tenerife se quedó este domingo a las puertas de su primer título de la Copa del Rey, al caer en una final muy disputada ante el Unicaja Málaga (80-83). El conjunto aurinegro peleó hasta el último resuello por llevarse la victoria, pero terminó cediendo ante un rival que jugó mejor sus opciones en los últimos tres minutos.

COMUNICACIÓN CBC.-

El rebote ofensivo de los andaluces, así como la irrupción de Kalinoski y, sobre todo, de Tyson Carter, en los momentos más calientes del encuentro, frustraron las posibilidades de un equipo, el de Txus Vidorreta, que se lo dejó todo sobre la cancha y soñó con argumentos para adjudicarse un triunfo, que finalmente le fue esquivo.

El partido nació y creció muy parejo. Lo intentó Unicaja de entrada explotando el extra pass, pero el Canarias se mostró muy firme atrás para ir llevando poco a poco el choque a su territorio. En pleno pulso, los balones interiores a Gio Shermadini y la labor de los pequeños permitieron a los laguneros coger las riendas del electrónico.

Los insulares amagaron con coger velocidad de crucero (33-26), pero se dejaron más puntos de la cuenta desde el tiro libre (6/11) y el Unicaja Málaga se agarró al partido, aprovechando sus segundas opciones en ataque: nueve al descanso por ninguna de los tinerfeños.

El arreón de los andaluces les llevó incluso a recuperar el mando en el marcador (36-37), pero un canastón sobre la bocina de Marcelinho Huertas, el segundo a esas alturas de partido, llevó la contienda al receso con un 39-37 para los aurinegros y el encuentro totalmente abierto.

A la vuelta de la pausa, el Unicaja trató de prolongar su buen hacer en el rebote ofensivo y salió con todo para firmar un parcial de 0-7 (39-44). Lejos de rendirse, el Canarias reaccionó con enterenza y carácter. La magia de un Marcelinho omnipresente cimentó la remontada de los tinerfeños, que firmaron unn arreón de 14-0 para ponerse nueve arriba mediado el tercer cuarto (56-47).

Fue ahí cuando los de Ibon Navarro encontraron un filón en las acciones de Kalinoski y, especialmente, de un Carter, con piernas y acierto para ser determinante. El parcial del Málaga (3-10) devolvió el partido al alambre (60-60, min 30). Trató entonces el Lenovo Tenerife de imponer su sello, pero no pudo exprimir sus armas.

Un nuevo arreón andauz, con sendos triples de Barreiro y Osetkowski (69-77), puso ya el partido muy cuesta arriba. Y el Unicaja no perdonó. Los de Ibon Navarro jugaron bien sus bazas y sellaron su título de Copa para desconsuelo de los aurinegros, que pese a la derrota, cayeron con orgullo. El orgullo de un grupo totalmente comprometido con la causa y que seguirá peleando por cosas bonitas. ¡Cabeza alta! ¡Volveremos!

1 Comentario
  • Francisco León Arencibia
    Publicado el 22:52h, 19 febrero Responder

    Esos triples!!!!!…. Porcentajes brutales!… pero que gran DEFENSA y muchisimo teabajo de TODOS…. A seguir!!!💪💪💪🏀💛🖤💪💪💪👏👏👏👏

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