Viejas glorias del BALONCESTO en la Bodega de los vinos Brumas de Ayosa

Sábado especial el vivido ayer por un nutrido grupo de veteranos del baloncesto tinerfeño.

Día de visita a la Bodega Comarcal Valle de Güímar, donde se elabora la prestigiosa y premiada marca de vinos BRUMAS DE AYOSA, empresa que preside el entrenador actual del CB Icocia de Arafo, el cofundador y ex jugador Bruno Albertos Pérez.

Un grupo de diecisiete personas, con presencia de ex jugadores que formaron parte de la historia del baloncesto en los años sesenta y setenta y que siguen vinculados al deporte de la canasta.

Hablamos de Fernando Villamandos, comentarista de Basketmanía y quien fuera jugador del CB Canarias, además de entrenador del CB Guancha, Luther King, entre otros.

Chano Marante una institución cestista, quien formó parte del CB San Isidro, además de ser, durante años, el alma mater del CB Guancha.

Otra leyenda que participó de este momento fue José Damián Gutiérrez Monje, con una larga trayectoria en equipos como el Disa, Kaiser, La Matanza, La Victoria, además de formar parte activa de la selección de Tenerife.

Jerónimo Morales Barroso, ex jugador histórico del CB Guancha, tampoco se perdió este encuentro. Una figura icónica y trascendental en la historia del pueblo y en la trayectoria del Club. Su nombre es sinónimo de dedicación, compromiso y entrega a la educación y el deporte.

Presencia de gente menos mayor, caso de Eduardo Marante, del CB Guancha, Sergio, hijo de Jerónimo Morales y Rodolfo, de la bodega de vinos Zanata, de La Guancha.

Con ellos, Manolo Gómez, ex presidente de la Federación Canaria y actual consejero delegado de la empresa IDECO que, entre otras instalaciones, gestiona el Pabellón Santiago Martín.

Para «hacer la crónica» y dar fe del reencuentro, los periodistas de Jornada Deportiva y El Día Javi Soto y Agustín Arias.

El anfitrión fue Bruno Albertos. Actualmente entrenador del primer equipo del CB Icocia, quien formara parte como jugador del citado club arafero en los años de su fundación y hombre que ha sabido poner en un pedestal a la Bodega Valle de Güímar con su excelente gestión.

Él se encargó de ejercer de guía en la visita a la bodega y ofrecer una degustación de los vinos que allí se producen y que han recibido infinidad de premios desde que la empresa, que cuenta con un centenar de socios, afrontó su valiosa y ejemplar segunda etapa, para satisfacción de la gente del Valle de Güímar.

Tras saborear el Brumas de Ayosa blanco seco, el también premiado y prestigioso tinto, así como las otras reliquias de la Bodega, sita en lo alto de Arafo, almuerzo en el guachinche «Kilómetro 2», ubicado en la carretera general.

Allí, entre plato y plato, Chano Marante nos contó una anécdota que habla de la pasión de tres directivos del CB Guancha. En su etapa de concejales del Ayuntamiento, y cuando se acordó establecer unas primas por asistir a los plenos, ellos decidieron destinar ese dinero a la compra de equipajes. «Ya cada uno tenía su trabajo y su sueldo y ese dinero le venía muy bien al Guancha», indicó Marante.